Thorn Yar y su familia tienen la esperanza que nunca tuvieron antes de un futuro diferente.

Thorn Yar, de 23 años, y su esposo Yaw Laus, de 26, apenas inician su vida juntos y están comenzando su propia familia. Viven con los padres de Yar en Kseit Borey. Sus padres se mudaron aquí en 2006 cuando descubrieron que podían recibir tierras y tenían la esperanza de construir una vida diferente.

Desde que Yar ha vivido en Kseit Borey, ella y su familia han luchado por sobrevivir. Tenían tierras, pero eran pobres, por lo que no podían limpiar y arar la tierra mientras trataban de alimentarse. El padre de Laus y Yar a menudo trabajaba en la jungla cortando leña a cambio de pequeñas cantidades de efectivo y arroz o la vendía en el mercado local. Este es un trabajo peligroso y difícil en el que a menudo se habrían ido por 2-3 semanas a la vez. El resto de la familia buscaba comida y agua; a veces Yar también tendría que trabajar como jornalero ganando muy poco, alrededor de $ 1.25 por día. Usando una pequeña cantidad de tierra que pudieron limpiar y arar, cultivaron arroz, pero nunca fue suficiente para comer y vender con el fin de progresar; de esta manera, la familia quedó atrapada en un ciclo de pobreza.

¡Ahora la vida es muy diferente para Yar y su familia! Desde que recibieron acceso a agua limpia y sus búfalos de agua, han podido hacer grandes cambios. Con la ayuda de sus búfalos, han limpiado y arado una gran cantidad de tierra y la familia ahora cultiva mucho arroz y también tiene un jardín, donde cultivan yuca, maíz y otros vegetales durante todo el año. El búfalo de agua también produce estiércol y la familia recibió capacitación sobre cómo usarlo mejor para hacer florecer sus cultivos. Ahora tienen suficiente comida para comer y vender.

Hoy el bebé de Yar & Laus va a entrar en un mundo de oportunidades que ellos no tuvieron antes. La familia planea seguir expandiendo su jardín y cultivar cacahuates y frijol mungo. Yar está ahorrando para una motocicleta que le permitirá ir más lejos y vender sus cosechas. Siempre ha soñado con construir una nueva casa para su propia familia y ahora ese sueño es posible. ¡El futuro es brillante para Yar y su familia!